El primer paso para mejorar tu biomecánica, y con ella tu experiencia sobre la bici es comprender todos los factores que la condicionan
Altura de sillín, altura de talón y rotaciones. ¿Por qué?
Podría suponerse que la correcta altura del sillín se establece midiendo los segmentos desde el plano sagital (vista lateral del ciclista). Pero.. ¿afectan estas angulaciones a los otros planos de movimiento?
Históricamente se ha enfatizado en la extensión de rodilla como medida principal para ajustar la altura del sillín correcta. Con el paso de los años podemos relacionar la Biomecánica global del ciclista a la flexión plantar o “altura del talón”; la naturaleza y diseño articular del pie y su eje en el tobillo (articulación subastragalina) nos obliga a ajustar la altura del sillín también en función de las rotaciones (plano transversal) así como alteraciones del plano frontal que se deriven como consecuencia de la altura del talón.
La rodilla tiene poco rango de movimiento en el plano transversal (rotación). En realidad, funciona casi únicamente de manera fisiológica como una visagra en el plano lateral. En ese mismo plano lateral el pie tiene la capacidad de realizar la flexión plantar (punta de los dedos hacia abajo) y flexión dorsal (punta de los dedos hacia arriba).
Imagen 1. Dorsiflexión y flexión plantar en el plano lateral previa a la compensación.
En flexión plantar, la articulación subastragalina (eje del tobillo) tiene muy poca movilidad para pronación (hundir dedo gordo hacia abajo), sin embargo tiene mucha movilidad para
supinar el pie (levantar dedo gordo hacia arriba visto desde el plano frontal).
Se sugiere hacer la prueba; en flexión plantar, trate de pronar el pie y compare el rango disponible en contraposición con la supinación del pie. Como consecuencia, una flexión `plantar fuera del rango controlable por parte del ciclista al pedalear tenderá a la supinación del antepie, punto de contacto metatarsal (contacto en la parte externa del pie. Ver imagen 1).
La cantidad de supinación o pronación del antepie condicionará el área de contacto de apoyo plantar así como la alineación de la cadena tobillo-rodilla-cadera. De ahí que la altura del talón (cantidad de dorsiflexión y flexión plantar) sea de importancia capital a la hora de ajustar la altura del sillín; comprometerá el movimiento en el plano transversal (rotaciones de los talones), la dinámica del ciclista visto de frente y comprometerá también la actividad muscular en el ciclo de la pedalada reclamando un sobreesfuerzo a la musculatura estabilizadora de rodilla, pie y cadera.
Dorsiflexión y flexión plantar en el plano sagital. Post ajuste.
La altura correcta del sillín se ve condicionada por la mecánica y naturaleza de la flexión plantar y cómo ésta afecta a los tres planos de movimiento, mientras que la rodilla no dispone de tanto rango mecánico. Controla tu talón y serás probablemente un ciclista más neutro y estable.
Feel Cyclistlab!
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