Uno de nuestros clientes ilustres comparte su historia de cómo los retos biomecánicos de un ciclista cambian con el tiempo
En términos generales, la Biomecánica está muy condicionada por los siguientes factores primarios;
1.-Estructura y movilidad del ciclista
2.-Fuerzas que intervienen al pedalear según infinidad de factores (con la consecuente afectación a dicha estructura).
3.- Capacidad de control del sistema neuromuscular para gestionar el estrés que recibe la estructura y garantizar la estabilidad del binomio ciclista-bicicleta.
Valorar y entender las particularidades biomecánicas de un ciclista sobre su BTT nos obliga a profundizar en los factores característicos de la propia disciplina.
ESTRUCTURA IDÉNTICA A OTRAS DISCIPLINAS
A pesar de que existen ciertas particularidades en el apartado fuerzas (2) y sistemas de control (3), la estructura del ciclista continúa siendo la misma sobre una BTT. Seguimos estudiando/valorando un sistema de palancas que disfruta de una capacidad funcional y de compensación dentro de un rango acotado y que pedalea anclado a sus pedales definiendo un sistema biomecánico cerrado. Es decir, el ciclista, “la estructura”, sobre la bicicleta que sea, sigue siendo “el mismo ciclista”; los pies, rodillas, pelvis, columna, hombros o manos, con sus músculos y sus nervios, son exactamente los mismos sobre cualquier bicicleta. Desde este punto de vista, la estructura reclamará unas necesidades que atender también sobre la BTT.
CARACTERÍSTICAS ESPECÍFICAS. PARTICULARIDADES.
Ahora bien, no cabe duda de que la dinámica difiere de otras disciplinas en algunos aspectos. El hecho de que se salven contínuamente obstáculos sobre terrenos inestables o irregulares obliga al ciclista a compensar mucho más, moviéndose en un rango más amplio con este propósito. Es decir, el ciclista recibirá muchas más fuerzas en infinitas direcciones que le reclamarán gestión propioceptiva. Desde el punto de vista del ajuste, esta misma característica exige garantizar una estabilidad mayor del sistema para controlar todas las fuerzas que recibe; muchas más que en otras disciplinas y que comprometerán la interacción del binomio ciclista-bicicleta. Como consecuencia, y para garantizar la estabilidad e integridad del ciclista, los sistemas de control neuromuscular tienen que trabajar más. El trabajo propioceptivo es mayor sobre la BTT para lidiar con las problemáticas que se manifiestan constantemente con el equilibrio.
SOBRE LA BTT…

Hemos de tener muy en cuenta que el eje en un sistema de palancas tendirá a rotar según coloquemos la emisión/origen de la fuerza respecto del mismo eje, y dependiendo de este factor, la estructura recibirá en consecuencia mayor o menor resistencia. La estructura deberá de lidiar con la citada resistencia al pedalear, sin perder el control.
Por lo tanto, las angulaciones de las palancas primordiales fémur-tibia-pie ( altura y retroceso del sillín) tienen que ofrecer la eficacia necesaria para una correcta función muscular en el ciclo de la pedalada, pero sin poner en riesgo el óptimo “control neuromuscular”. El control tiene una incidencia capital en la Biomecánica global porque es el factor que nos permite conseguir la establilidad del sistema al pedalear y mantener así el equilibrio..
Por otro lado, el ajuste en la distribución de pesos entre sillín y manillar define una posición más erguida en el ángulo de espalda (más cercana a la posición en bipedestación) ya que existe así menos riesgos de estresar en exceso los sistemans de control. (Resulta más probable sentirse cómodo sobre una BTT que sobre una cabra…) Las tensiones musculares de flexión del tronco pueden alterar el control propioceptivo con cierta facilidad. Esta misma repartición de pesos entre el sillín y manillar sobre la BTT, proporciona una tracción más sólida en grandes pendientes y libera de peso la parte frontal de la bicicleta para salvar obstáculos; el ciclista tiende a disfrutar de mayor capacidad de control con un ángulo de espalda que permita poner más peso en la parte trasera de la bicicleta, y así mejorar la manejabilidad de la bicicleta en terrenos abruptos.
CONCLUSIÓN
Una comprensión biomecánica completa va mucho más allá del análisis de las angulaciones en diferentes articulaciones del ciclista –cinemática-, fácilmente objetivable con los sistemas de medición actuales que centran sus soluciones alrededor de la bicicleta y que resultan altamente insuficientes para la Biomecánia. Para llegar al quid de la cuestión, deberemos de comprender cómo varía la asociación de cadenas cinéticas (musculares, con carga) en función del ajuste (variando así las palancas y tensiones), cómo intervienen las fuerzas y su afectación a la estructura, además de cómo éstas son gestionadas por los sistemas de control.
Las fuerzas no se ven, pero condicionan directamente el comportamiento del ciclista cuando pedalea. Afectan a su estabilidad.
Feel Cyclist Lab.
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